Exteriores ha rechazado esta mañana en un comunicado las acusaciones y medidas israelíes después del plan avanzado a primera hora por Sánchez. “El Gobierno de España rechaza tajantemente las falsas y calumniosas acusaciones de antisemitismo por parte del Gobierno israelí hacia España y los españoles, así como la inaceptable prohibición de entrada a Israel a dos miembros del Gobierno de España”, reza la nota del departamento de Albares.
“Las medidas en relación a la inhumana situación en Gaza y Cisjordania, anunciadas hoy por el presidente del Gobierno”, continúa Exteriores, “responden al sentir mayoritario de la sociedad española y se adoptan en el marco de su soberanía y en coherencia con su defensa de la paz, los derechos humanos y la legalidad internacional”.
El ministerio ha recordado que en los últimos años España ha concedido la nacionalidad a 72.000 sefardíes, “que ya son conciudadanos nuestros”, y que “este Gobierno condenó inmediatamente el horrible atentado del grupo terrorista Hamás” y ha exigido “en todo momento” la liberación de todos los rehenes. “Este Gobierno está comprometido contra el antisemitismo y el racismo y con un país en el que no cabe ningún tipo de discriminación”, ha incidido.
Dicho esto, Exteriores señala que España defiende la existencia de dos Estados, Israel y Palestina, “que convivan en buena vecindad y se garanticen mutuamente la paz y la seguridad”, y exige a Israel el fin de la ocupación de Gaza y Cisjordania, el fin de la violencia contra la población civil palestina y el fin del bloqueo humanitario a la Franja. “El Gobierno de España no se dejará amedrentar en su defensa de la paz, el derecho internacional y los derechos humanos”, advierte.