Aunque la caída de los precios de la energía se está dejando notar en la cotización del sector, Goldman Sachs cree que hay que diferenciar entre compañías. En este sentido, valoran la estabilidad de las ganancias de Iberdrola frente a las de otros grupos de esta industria.
“En un sector afectado por las rebajas de beneficios, debido a la caída de los precios de la energía, consideramos que la limitada volatilidad de los beneficios de Iberdrola es una característica muy atractiva”, explica el banco, que mantiene un precio objetivo para las acciones de Iberdrola de 13 euros, lo que supone un potencial de revalorización de casi el 24% si se toma como referencia el cierre del pasado viernes.
Para el ejercicio en curso, Iberdrola espera un aumento del 5-7% en su beneficio neto, excluyendo las plusvalías por la rotación de activos. Además, prevé que el dividendo crezca en consonancia con los resultados financieros. El grupo proporcionará más detalles sobre sus perspectivas para los próximos años el próximo 21 de marzo durante su Capital Markets Day, que se celebrará en Londres.
Por otro lado, Goldman Sachs ha rebajado la recomendación para Endesa a “neutral”, estableciendo un precio objetivo de 19 euros, que aún supone un potencial alcista del 17,4%. Durante el año 2023, la compañía logró un beneficio neto de 742 millones de euros, marcando una disminución del 71% en comparación con el ejercicio anterior. Esta caída se atribuye principalmente a una menor incidencia de elementos extraordinarios. En 2022, Endesa registró plusvalías derivadas de la venta parcial de su división de movilidad eléctrica a su empresa matriz, Enel.