Convocados por Satse, estos trabajadores de la sanidad se concentrarán en centros sanitarios de las distintas provincias españolas para denunciar que este mes de junio han vuelto a sufrir un recorte del 27% en su paga extraordinaria.
“En cada paga, y ya son 30 las recortadas, son 321 euros menos, en caso de tener un trienio trabajado, y más de 366 euros si lleva 15 años”, afirma el citado sindicato.
Estas protestas se enmarcan en la ofensiva de Satse bajo el lema “de nuestra extra, que no se coman ni un euro”, con el objetivo de reforzar la presión al Gobierno para que en la próxima Ley de Presupuestos Generales del Estado se incluya la recuperación del importe íntegro de las pagas extraordinarias.
Recorte desde junio de 2010
El sindicato de enfermería recuerda que el Gobierno recortó en junio de 2010 las pagas extra a los trabajadores del sector público como una medida extraordinaria, “fruto de la crisis que sufría nuestro país, y con el compromiso de que acabaría cuando la economía del país volviera a crecer”.
“Han pasado 15 años desde que José Luís Rodríguez Zapatero aprobara este recorte, pero ninguno de los ejecutivos posteriores, ni el de Mariano Rajoy ni el de Pedro Sanchez, han hecho absolutamente nada por revertirlo. Ni ellos ni los grupos parlamentarios que han seguido apoyando este recorte en las sucesivas leyes de Presupuestos”, afirman desde la organización sindical.
Con este recorte, apunta, el Gobierno “está vulnerando” el Estatuto Marco del personal estatutario de los servicios de salud y el Estatuto Básico del Empleado Público, “que establecen que el sueldo base y trienios de las pagas extras deben tener un importe igual al de una paga mensual”.
Dicho esto, denuncia enfermeras y fisios sufren una “importante” pérdida de poder adquisitivo, que cifra en un 20%.
“Los profesionales perdemos dinero todos los meses mientras que el coste de la vida no ha parado de crecer en los últimos años. Todo es más caro, la electricidad, el gas, la vivienda, cualquier producto de consumo…”, remarca.
Casos de corrupción
Satse también ha denunciado que, “en un país donde los casos de corrupción, malversación y despilfarro de dinero público siguen siendo habituales, resulta aún más indignante la falta de voluntad política para devolver a enfermeras y fisioterapeutas lo que les pertenece por derecho”.
“Mientras se rescatan bancos, se pagan sobresueldos, se despilfarra el dinero público y se multiplican los asesores, nos piden que trabajemos por dos, a todas horas y todos los días del año y con medios insuficientes, que cubramos las bajas sin previo aviso, y que no podamos conciliar nuestra vida laboral y personal… A cambio, este mes de junio comprobamos, una vez más, cómo los ‘comepagas’ vuelven a despedazar nuestro reconocimiento retributivo”, concluye.