El importe colocado se ha situado por encima del rango medio estimado y la demanda de los inversores ha superado ampliamente los 10.000 millones de euros, por lo que continúa el apetito inversor de los mercados por los títulos de deuda españoles.
En concreto, el organismo dependiente del Ministerio de Asuntos Económicos ha colocado 479,33 millones en la obligación a 15 años ligada a la inflación, frente a una demanda de 824 millones, y el interés marginal se ha colocado en el 1,550%.
Asimismo, el Tesoro ha adjudicado 2.400 millones de euros en el bono a cinco años, por debajo de los 4.500 millones demandados, con una rentabilidad marginal del 3,339%; mientras que el bono a 10 años el interés se ha situado en 3,589% y el importe colocado ha ascendido a 1.337,28 millones, la mitad de los 2.663 millones solicitados por los inversores.
Por último, en la obligación a 30 años se han colocado 1.666,24 millones de euros, frente a una demanda de 2.300 millones, y ha ofrecido un interés marginal del 4,473%.
En la última subasta de octubre, celebrada el pasado día 19, el Tesoro Público español colocó 4.915,56 millones de euros en obligaciones del Estado, en el rango alto previsto, remunerando con intereses más altos a los inversores y elevando por encima del 4% la rentabilidad ofrecida por la deuda a 10 años.
La de hoy es la primera emisión que celebra el Tesoro desde que el Banco Central Europeo (BCE) decidiera dejar intactos los tipos de interés tras diez subidas consecutivas. Ayer, la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) también optó por mantener tipos, en su caso por segunda vez consecutiva.
Los inversores particulares siguen mostrando gran interés por la compra de deuda, principalmente a corto plazo, dada su alta rentabilidad, que ha ido creciendo desde inicios de 2022.
A esta primera emisión de noviembre le seguirán otras el día 7, con letras a 6 y 12 meses; el día 14, con letras a 3 y 9 meses, y otra más el día 16, de bonos y obligaciones del Estado.
PREVISIONES PARA 2023
La emisión bruta por parte del Tesoro Público será este año de 256.930 millones de euros, lo que supone un aumento del 8,2% respecto a lo estimado para 2022, debido al alza de los tipos de interés.
En cuanto a la emisión neta, el Gobierno ha anunciado que se reducirá en 5.000 millones de euros para 2023 gracias a la «buena marcha» de la economía española y el cumplimiento «holgado» de los objetivos fiscales. Con ello, España pasará de una emisión de deuda neta de 70.000 millones a 65.000 millones de euros.
