El Tribunal Supremo ha suspendido hasta el próximo 9 de noviembre la declaración de los miembros de la Mesa del Parlament, que han sido citados este jueves por la declaración de independencia unilateral aprobada por la Cámara catalana. Asimismo, ha ordenado “vigilancia policial” hasta ese día.
El juez Pablo Llarena, que instruye la causa por rebelión, sedición y malversación contra los miembros de la Mesa, ha aceptado la petición de los abogados de las defensas de aplazar hasta el jueves de la semana que viene las declaraciones de los investigados. Ese día, 9 de noviembre, es fiesta en Madrid con motivo de la Almudena.
Tras esta decisión y a petición de la Fiscalía, el Supremo ha ordenado poner “vigilancia policial” a Carme Forcadell y al resto de miembros de la Cámara catalana hasta el día de la nueva declaración. Los citados han tenido que facilitar la dirección de su domicilio y un número de teléfono para que la policía pueda hacer controles. Se trata, según fuentes jurídicas, de garantizar que estas personas están a disposición para cualquier posible llamamiento.
