La situación política tras el ingreso en prisión de Santos Cerdán ha activado movimientos en el Partido Popular para tantear posibles apoyos y reconfigurar alianzas. En este contexto, Miguel Tellado, portavoz parlamentario del PP, llamó este martes a Maribel Vaquero, del PNV, en un gesto que desde la formación vasca han recibido con escepticismo, al considerar que la iniciativa no iba acompañada de un interés real por el diálogo.
Una llamada tardía y una respuesta escueta
Según el PNV, la llamada de Tellado se produjo apenas unos minutos antes de que este ofreciera una rueda de prensa en el Congreso. En dicha conversación, descrita como “breve”, el dirigente del PP expresó su voluntad de retomar la relación entre ambas formaciones. La respuesta del PNV fue clara: “Hemos hecho acuse de recibo y poco más”.
Desde el entorno nacionalista consideran que esta toma de contacto no cambia su percepción sobre la actitud del Partido Popular, a quien acusan de mantener una estrategia hostil hacia sus posiciones. “No parece que quieran escuchar nada de otros grupos parlamentarios”, reprochan.
Tellado ha advertido a los socios del Gobierno que son “corresponsables” de la continuidad del Ejecutivo y de la corrupción socialista
Desconfianza y reproches por los ataques públicos
El desinterés mostrado por el PNV en esta maniobra del PP se justifica, en parte, por lo que consideran una falta de sinceridad en el intento de acercamiento. Critican que Tellado haya priorizado hablar con los medios antes que con su portavoz parlamentaria, y que además lo haya hecho para lanzar acusaciones.
Desde el PNV recuerdan que llevan semanas siendo blanco de críticas por parte de los populares y que esta llamada no parece responder a un cambio de actitud. Para la formación jeltzale, la ronda de contactos impulsada por Feijóo no busca construir puentes reales, sino “una estrategia de marketing” en plena ofensiva política tras el escándalo del exnúmero tres del PSOE.
El PP intensifica la presión a los socios del Gobierno
En su comparecencia pública, Tellado no ahorró en críticas hacia quienes sostienen al Gobierno de Pedro Sánchez. Acusó a los partidos aliados de ser cómplices del deterioro institucional, y los llamó a reflexionar sobre el “daño que le hacen al país y a sí mismos”.
Con este movimiento, el Partido Popular pretende agitar el tablero parlamentario y sembrar la duda entre los apoyos del Ejecutivo en el Congreso. Sin embargo, la fría acogida del PNV muestra que, al menos por ahora, sus intentos no logran fracturar la mayoría que respalda a Sánchez.