En comparación con el segundo trimestre del año pasado, el PIB del Reino Unido experimentó un crecimiento del 2,9%. De este modo, la economía británica se situaba al cierre del segundo trimestre de 2022 un 0,6% por encima del nivel previo a la pandemia de Covid-19.
En el segundo trimestre, la actividad del sector servicios se contrajo un 0,4%, mientras que la producción aumentó un 0,5% y la actividad de la construcción creció un 2,9%.
De su lado, el gasto real de los hogares entre abril y junio cayó un 0,2%, debido a las caídas en turismo, ropa y calzado, alimentos y bebidas no alcohólicas, así como restaurantes y hoteles. Esto fue parcialmente compensado por aumentos en el gasto en transporte, vivienda y salud.
Asimismo, el gasto de consumo del Gobierno cayó por segundo trimestre consecutivo, disminuyendo un 2,9% en el segundo trimestre de 2022. Esto se debió al menor gasto sanitario, que reflejó caídas en las actividades relacionadas con la Covid-19.
El déficit comercial de bienes y servicios del Reino Unido mejoró a un 4,7% del PIB nominal en el segundo trimestre de 2022, frente al 5,4% de los primeros tres meses de 2022.
En el mes de junio, la segunda mayor economía de Europa sufrió una contracción del 0,6% respecto del mes anterior, cuando había crecido un 0,4%.