El oro vuelve a brillar con fuerza como refugio ante la incertidumbre geopolítica. Este viernes, la onza troy del metal precioso ha superado los 3.400 dólares tras el ataque de Israel a Irán, en un contexto agravado por las nuevas presiones del presidente estadounidense Donald Trump hacia la Reserva Federal. La combinación de riesgo militar, tensiones monetarias y caída en las Bolsas está reforzando el atractivo del oro como valor seguro.
La onza de oro acumula una revalorización del 30,5% en lo que va de 2025, después de superar por primera vez los 3.000 dólares el 14 de marzo
Israel ataca Irán e impulsa el precio del oro
Durante la madrugada, docenas de cazas israelíes bombardearon objetivos militares en Irán en una primera fase de un «ataque preventivo» dirigido a frenar el programa nuclear iraní. La respuesta de Teherán no se hizo esperar: más de un centenar de drones fueron lanzados contra Israel como represalia.
Este nuevo episodio de violencia ha generado un efecto inmediato en los mercados internacionales, donde el oro se revalorizó un 1,75% intradía, hasta los 3.444 dólares, muy cerca del récord de 3.500 dólares alcanzado el pasado 22 de abril.
Trump carga contra la Fed y agita la política monetaria
Paralelamente, el mercado del oro también se ha visto impulsado por las tensiones entre Donald Trump y la Reserva Federal. El presidente de EEUU arremetió con dureza contra Jerome Powell, calificándolo de «imbécil» por no recortar los tipos de interés.
El oro, junto al petróleo, se convierte en el principal termómetro del conflicto en Oriente Próximo y la incertidumbre en la política económica estadounidense
Trump ha advertido que podría «forzar algo» para presionar al banco central y así lograr rebajas en el precio del dinero. Esto ha alimentado la expectativa de una política monetaria más laxa, lo que históricamente beneficia al oro por su correlación inversa con el dólar.
Bolsas caen y el petróleo se dispara
El miedo de los inversores se reflejaba también en los mercados de renta variable, con caídas superiores al 1,5% en Europa a media mañana. En paralelo, el petróleo Brent se disparaba más de un 7%, rozando los 74,5 dólares por barril, otro síntoma de la creciente inestabilidad.