El precio de los alquileres en España tendrá a partir de ahora un nuevo límite de actualización.
Con la publicación del índice de referencia, el INE da cumplimiento a lo establecido en la Ley por el Derecho a la Vivienda, buscando evitar incrementos desproporcionados en las rentas de arrendamiento.
Este indicador sustituye las referencias tradicionales al IPC para los contratos firmados tras mayo de 2023, mientras que los anteriores seguirán sujetos al IPC o al Índice de Garantía de Competitividad (IGC), según lo estipulado en sus acuerdos.
¿Qué mide el nuevo índice de actualización de alquileres?
El nuevo índice difundido por el INE combina varios componentes: el Índice de Precios de Consumo (IPC), la inflación subyacente, las diferencias entre sus tasas de crecimiento anual y un parámetro relacionado con el crecimiento esperado a largo plazo, propuesto por la Dirección General de Política Económica.
Además, el índice incorpora un coeficiente moderador diseñado de manera conjunta por la Dirección General de Vivienda y Suelo del Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana y la Dirección General de Política Económica del Ministerio de Economía. Este mecanismo busca considerar las condiciones específicas del mercado de alquiler.
El índice toma como referencia el valor más bajo entre el IPC, la inflación subyacente y la tasa media ajustada para determinar el tope de revalorización anual
¿Qué contratos deben aplicar el nuevo índice?
Todos los contratos de arrendamiento firmados a partir del 25 de mayo de 2023 deberán usar este nuevo índice como límite para la actualización anual de la renta. El valor publicado cada mes por el INE, expresado con dos decimales, será el tope máximo que podrán aplicar los propietarios al revisar el precio del alquiler.
La disposición adicional undécima de la Ley de Vivienda obliga a utilizar este índice para evitar subidas excesivas en los alquileres, un objetivo que el Gobierno busca consolidar tras la crisis inflacionaria derivada de la guerra en Ucrania.
¿Qué pasa con los contratos firmados antes de mayo de 2023?
Los contratos anteriores a la Ley de Vivienda seguirán actualizando sus rentas conforme a lo pactado. Es decir, según el IPC o el IGC, dependiendo de lo que figure en el contrato.
Los contratos antiguos usarán el IPC o el IGC, este último con un tope del 2%, para actualizar sus rentas
En 2024, el Gobierno limitó de manera extraordinaria la actualización de los alquileres al 3% debido a la elevada inflación provocada por la guerra de Ucrania. Esta no fue la única medida: en 2022 y 2023 también se aplicaron topes de actualización basados en el Índice de Garantía de Competitividad, limitado al 2%.
Contexto: un mercado tensionado
El nuevo índice de referencia responde a la necesidad de controlar la evolución de los precios del alquiler, que se han tensionado notablemente en los últimos años. Con estas medidas, el Ejecutivo pretende dar mayor estabilidad y previsibilidad a los inquilinos, en un contexto de elevada demanda y oferta limitada.