La bolsa española ha puesto fin a una semana marcada por la tensión geopolítica y las decisiones de los bancos centrales. A pesar de que este viernes ha registrado un rebote, el Ibex 35 ha encadenado su segunda caída semanal consecutiva, consolidando una tendencia bajista que refleja la incertidumbre de los mercados. En paralelo, el conflicto entre Israel e Irán y las perspectivas económicas globales condicionan el ánimo inversor.
Segunda semana de descensos para el Ibex 35
El Ibex 35 ha cerrado la semana con un retroceso del 0,43%, situándose en los 13.850,3 puntos, alejándose así del umbral de los 14.000. El selectivo encadena dos semanas de pérdidas, aunque sigue siendo el índice bursátil más fuerte de Europa en 2025, con una revalorización acumulada del 19,45%.
Este viernes, sin embargo, el índice ha subido un 0,77%, pese al impacto de la ‘cuádruple hora bruja’, un fenómeno que incrementa la volatilidad al coincidir el vencimiento de opciones y futuros sobre acciones e índices en Europa y EEUU.
La banca ha vivido una semana volátil, mientras que el sector energético ha repuntado por la subida del petróleo
El conflicto Israel-Irán sacude a los mercados
El telón de fondo internacional ha estado dominado por la escalada bélica entre Israel e Irán, que suma ya ocho jornadas consecutivas de ataques. Este viernes, Israel ha bombardeado infraestructuras clave del Ministerio de Defensa iraní en Teherán, mientras que desde Washington, Donald Trump sopesa una intervención militar en Irán, decisión que podría tomar en las próximas dos semanas.
Según analistas, estos eventos podrían elevar el precio del petróleo por encima de los 100 dólares si se produce una escalada militar en el Estrecho de Ormuz, clave para el comercio energético mundial.
El petróleo Brent sube un 3,5% semanal hasta los 76,85 dólares por barril, mientras el West Texas avanza un 3,2% hasta los 75,3
La Fed mantiene los tipos, pero proyecta recortes en 2025
En el plano económico, la Reserva Federal (Fed) ha mantenido los tipos de interés en el rango del 4,25%-4,5%, pero ha anticipado dos posibles recortes antes de que acabe el año, según el dot plot. No obstante, expertos como Manuel Pinto dudan de que se produzcan dichas bajadas si la inflación no cede o el empleo no muestra síntomas de debilidad.
A nivel europeo, el Banco de Inglaterra ha mantenido sus tipos, mientras que el Banco Nacional de Suiza y el Norgesbank han optado por reducirlos.
El mercado sigue pendiente de la inflación y de los efectos del precio del gas y el petróleo sobre las decisiones monetarias
Subidas energéticas y caídas turísticas en el selectivo
Dentro del Ibex 35, las mejores empresas de la semana han sido Solaria (+8,6%), Repsol (+4,53%), Redeia (+3,38%), Naturgy (+3,02%), Merlín (+2,15%) e Iberdrola (+1,45%). Todas ellas se han visto impulsadas por la expectativa de precios energéticos al alza.
En el lado negativo, Indra ha liderado las caídas con un -5,84%, seguida de Acciona Energía (-5,33%), Colonial (-3,92%), Amadeus (-3,42%), Fluidra (-3,33%) e Indirex (-3,28%). En el caso de Indra, el freno del Gobierno al aumento del gasto en defensa ha sido clave.
El sector turístico ha sido uno de los más penalizados ante el riesgo de que el conflicto en Oriente Próximo se intensifique
Europa también cierra en rojo
Las principales bolsas europeas han seguido una dinámica similar: Milán ha perdido un 0,53%, Fráncfort un 0,7%, París un 1,24% y Londres un 1,41%. El euro se ha depreciado un 0,18% frente al dólar, mientras el bono español a diez años ha cerrado en el 3,213%, con una prima de riesgo de casi 70 puntos básicos respecto al bono alemán.
También se han registrado descensos en activos refugio: el oro cae un 1,83% y el bitcoin un 1,3%, cotizando este último en los 104.000 dólares.
Mirada puesta en los próximos datos macroeconómicos
Para la próxima semana, los focos estarán en la publicación del índice PMI en Europa y la inflación PCE en EEUU, que podrían ofrecer nuevas pistas sobre la evolución económica. Analistas esperan que los datos ayuden a calibrar si persiste la desaceleración económica en Europa y si la inflación sigue presionando a la Fed.