El Gobierno ha salido al paso de las críticas recibidas desde varios partidos de la oposición, entre ellos, el PP, a su plan de desescalada y a una nueva prórroga del estado de alarma. Para la ministra y portavoz del Ejecutivo, María Jesús Montero, lo “lógico” es que se mantenga. “No tendría ningún sentido que todo el esfuerzo realizado por el conjunto de la población no pudiera continuarse hasta finalizar, haría baldío, que hubiera sido en balde”, ha afirmado, al ser preguntada al respecto.
Montero, en una comparecencia junto a la ministra de Economía, Nadia Calviño, ha apelado a la “responsabilidad de las fuerzas políticas”, ya que carecería de “sentido” que “no pudiéramos llegar en buenas condiciones a la meta por discrepancias” políticas.
“Sería una verdadera lástima, sería incomprensible que no tuviéramos un marco legal y el apoyo del parlamento para poder afrontar con máximas garantías este proceso de desescalada”, ha dicho, por su parte, Calviño.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tendrá que acudir al Congreso de nuevo la próxima semana para pedir a la Cámara su apoyo a una nueva extensión de las medidas de restricción para otros 15 días. Algo para lo que no tiene un ‘plan b’ en caso de que sea rechazado.
