El déficit público se situó al cierre de junio en el 0,74% del PIB, según las cifras publicadas hoy por el Ministerio de Hacienda, una caída de 0,35 puntos porcentuales respecto a junio de 2017. En concreto, el saldo negativo de las arcas públicas alcanzó los 9.012 millones de euros, un 28,8% menos que en el mismo período de 2017.
Esta reducción del déficit público se explica por un incremento de los recursos del 8,2%, superior al incremento de los gastos del 3,5%.
Excluyendo los intereses devengados se registró un superávit primario de 4.004 millones de euros, superior al superávit de 727 millones registrado en 2017. Recursos no financieros del Estado Los recursos no financieros ascendieron a 92.463 millones, lo que implica un incremento del 8,2% respecto a 2017.
Los recursos impositivos, que representan el 87,3% el total, ascienden a 80.740 millones, lo que supone un aumento del 7,9% interanual. Destacan el incremento del 7,6% del IVA, hasta los 40.535 millones, del 11,8% del IRPF, hasta los 18.048 millones y del 8,8% del Impuesto sobre Sociedades, hasta los 8.387.
Las rentas de la propiedad han aumentado un 24,6%, sobre todo por los mayores dividendos del Banco de España, 942 millones en 2018 frente a 516 millones en 2017, y de ENAIRE por 497 millones en 2018 frente a 292 millones en 2017.
Por otro lado, Hacienda ha hecho público también que en los cinco primeros meses de 2018 la necesidad de financiación conjunta de la Administración Central, las comunidades autónomas y los fondos de la Seguridad Social, ascendió a 16.289 millones excluida la ayuda financiera, un 10,7% menos que en el mismo periodo del ejercicio anterior.
En términos de PIB, esta cifra equivale al 1,34%, registrando una caída de 0,23 puntos porcentuales de PIB. Si se incluye en ambos períodos el saldo neto de la ayuda financiera, el déficit sería de 16.177 millones, que representa el 1,33% del PIB. Con una reducción interanual del 12,6%.
En 2018 el saldo neto de la ayuda financiera es positivo por importe de 112 millones, como consecuencia de las menores indemnizaciones efectuadas tanto por el FROB como por BFA, mientras que en 2017 el saldo era negativo por importe de 262 millones.
