Economía

El BCE defiende el euro digital como cuestión de soberanía estratégica frente a EEUU

La creación de un euro digital es ya una prioridad estratégica para la Unión Europea. Así lo defendió este martes Piero Cipollone, miembro del comité ejecutivo del Banco Central Europeo (BCE), en una audiencia ante la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo.

Según Cipollone, la UE debe actuar de forma decidida para reducir su dependencia de proveedores extranjeros de pagos digitales y proteger su soberanía monetaria frente a iniciativas como las criptomonedas estables impulsadas desde EEUU por el presidente Donald Trump.

Actualmente, la región enfrenta una «debilidad estructural» en el ámbito de los pagos digitales, advirtió Cipollone, quien insistió en que asegurar la autonomía en servicios esenciales, como los pagos, es tan urgente como garantizar la defensa o la energía.

Riesgos de depender de proveedores extranjeros de pagos digitales

El representante del BCE alertó de que la dependencia de servicios de pago extranjeros «debilita el potencial económico y la competitividad» de Europa, además de comprometer su resiliencia y soberanía monetaria.

«No actuar no sólo nos expone a riesgos significativos, sino que también nos despoja de una gran oportunidad», enfatizó Cipollone

El auge de las carteras digitales y las medidas de la nueva administración estadounidense para promover criptomonedas estables respaldadas por dólares representan, en opinión del BCE, una amenaza directa para la estabilidad financiera europea. Según Cipollone, este fenómeno podría provocar una fuga de depósitos en euros hacia EEUU, debilitando aún más la autonomía del bloque.

El euro digital como piedra angular de la autonomía europea

Para hacer frente a estos desafíos, Cipollone defendió una «asociación público-privada» como vía para retener la soberanía en el ámbito de los pagos digitales, situando al euro digital como piedra angular de esta estrategia.

«Ofrecer una opción digital de pago segura y aceptada universalmente reduciría nuestra dependencia en proveedores extranjeros y traería beneficios para todos», sostuvo

El euro digital, explicó Cipollone, sería gratuito para su uso básico, protegería a los comerciantes europeos de recargos excesivos de las tarjetas internacionales y podría incluso utilizarse sin conexión a Internet.

Sinergias con el sector privado

Cipollone aclaró que el proyecto no competirá con las iniciativas privadas, sino que buscará «explotar sinergias» para facilitar que las soluciones del sector privado puedan escalar más rápidamente en toda la Unión Europea.

Además, insistió en la necesidad de avanzar rápidamente en la legislación relativa al euro digital para no ralentizar la respuesta colectiva frente a los nuevos riesgos globales.

Acceda a la versión completa del contenido

El BCE defiende el euro digital como cuestión de soberanía estratégica frente a EEUU

Carlos Moyano

Entradas recientes

Si se cobrara por discurso, ya tendríamos jornada laboral de 20 horas

Esta semana el Pleno rechazó la rebaja de la jornada laboral. Ganaron los partidarios del…

5 horas hace

Francia: la patronal amenaza con una movilización si suben los impuestos a las empresas

En plena negociación fiscal, la patronal denuncia que las compañías francesas soportan una presión récord…

7 horas hace

Cacao: el precio se enfría, el riesgo no

El guion de 2025 combina cosechas tensas por clima y enfermedades con un consumo que…

7 horas hace

Afganistán: los talibanes borran la voz de las mujeres entre vetos educativos, laborales y un silencio mediático global

Desde 2021, Afganistán vive un entramado de vetos que cercenan la presencia femenina en todos…

8 horas hace

La cifra de heridos por una explosión en un bar de la capital asciende a 25, tres de ellos de gravedad

El suceso se ha producido en el bar Mis Tesoros de la calle Manuel Maroto,…

10 horas hace

Gaza supera los 420 muertos por inanición en plena hambruna

El drama humanitario en Gaza se agrava. El Ministerio de Salud del enclave palestino ha…

14 horas hace