La asociación traslada un decálogo al ministro Guindos en el que solicita también que el incremento de las comisiones se fije a referencias como el IPC. La ‘guerra’ de los cajeros automáticos abierta en la banca ha obligado al Gobierno a salir al paso y anunciar que en las próximas semanas podría presentarse una nueva normativa sobre el cobro de comisiones. Aprovechando esta coyuntura, Adicae ha trasladado al ministro de Economía y Hacienda, Luis de Guindos, un decálogo en el que propone que se fijen unas ‘reglas del juego’ en esta nueva normativa en preparación.
En primer lugar, la asociación de usuarios considera que el criterio de “proporcionalidad” debe ser referencia clave en la aplicación de comisiones, ya que a su juicio es injustificable, por ejemplo, que un descubierto en cuenta de 1 euro durante un día genere un coste de 35 euros para el consumidor.
La nueva regulación debe contribuir a “evitar prácticas colusorias en materia de competencia y efectos ‘arrastre’”.
Para Adicae, además la norma ha de contemplar mecanismos que eviten que las políticas de comisiones de las entidades “tiendan a enmascarar problemas de balance”, algo a lo que, según señala, apunta el hecho de que normalmente los aumentos de comisiones se producen en el segundo semestre de cada ejercicio, cuando los bancos ya pueden estimar o anticipar el resultado anual.
Los ingresos por comisiones de una entidad tampoco deberían suponer “más que una proporción tasada de los beneficios de dicha entidad”.
Asimismo, pide que se establezca “un régimen de comunicación obligatoria previa, y con suficiente antelación”, no sólo al Banco de España sino también a las organizaciones más representativas de los usuarios de servicios bancarios.
Adicae también considera que hay que reforzar al Banco de España y “habilitarle expresamente” para su intervención en materia de aplicación de comisiones que no respeten los principios y criterios fijados.
También solicita “mecanismos” para impulsar la negociación previa de las comisiones aplicables con las organizaciones representativas de los consumidores.
“No procederá el establecimiento ni el cobro de comisiones por servicios o actuaciones que ya se cobren por un servicio que de forma esencial responda al mismo o semejante fin”.
El incremento de comisiones “nunca podrá suponer un incremento superior a una referencia concreta” (sea el incremento del IPC anual o una medida macro similar)
Por último, Adicae pide que el cobro de las comisiones nunca pueda ser regresivo respecto a la cuantía de las cantidades depositadas por los consumidores en sus cuentas. Es decir, comisiones más onerosas para menores saldos, dado que sería expulsar a los consumidores del uso de un servicio muy común y necesario hoy en día como es una cuenta bancaria.
