Guindos confía en que CatalunyaCaixa, que ha recibido más de 12.000 millones en ayudas públicas, esté privatizada “antes del mes de agosto”. El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha confiado hoy en que CatalunyaCaixa, que ha recibido más de 12.000 millones de ayudas públicas, esté privatizada “antes del mes de agosto”.
Así lo ha señalado en declaraciones a periodistas recogidas por Efe poco antes de clausurar la Asamblea anual de la patronal de las aseguradoras españolas, Unespa, si bien no ha querido dar más detalles sobre el calendario de esta operación, que se ha suspendido ya dos veces en los últimos años.
Todo parece indicar que si Guindos quiere deshacerse de CatalunyaCaixa, el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) deberá abrir la mano y otorgar algún tipo de ayuda pública en todas y cada uno de los tres procesos en los que se dividirá la operación: la venta de la red de sucursales fuera de Cataluña, la cartera hipotecaria, y el propio banco en sí mismo.
Según publica hoy ElConfidencial.com, Popular y Evo Banco (tras el que está el fondo estadounidense Apollo), han solicitado ayudas públicas para pujar por la red de sucursales fuera de Cataluña de la entidad rescatada. Su demanda pasaría por exigir un esquema de protección de activos (EPA) o incluso por una parte de los activos fiscales diferidos (DTA) de CatalunyaCaixa, que ascienden a unos 3.500 millones de euros. La semana pasada, Cinco Días apuntaba otra posibilidad, que pasaría por que el FROB sacase de esta red los créditos hipotecarios, su principal lastre.
De hecho, de forma casi paralela a la venta de esta red de sucursales, el FROB venderá una cartera de préstamos hipotecarios dudosos o en riesgo de serlo por importe de unos 7.000 millones de euros, y el propio banco. Para estas operaciones, las entidades interesadas también han solicitado algún tipo de ayuda que les blinde ante potenciales pérdidas.
