Los trabajadores de los grupos de cajas rescatados se encuentran en una situación cuanto menos incómoda. A la ronda de despidos obligada por el rescate de Bruselas se unen las protestas que tienen que soportar día sí y día también por parte de los afectados por las preferentes, a pesar de que, tal y como recuerdan los sindicatos, muchos de los empleados son también tenedores de estos títulos, sin tener además la posibilidad de acudir a los arbitrajes.
Tal y como señala la sección sindical de UGT en Bankia en una circular, “los empleados de Bankia sabemos, y sufrimos, del desasosiego y malestar social padecidos por los clientes afectados” por la quita aprobada por el FROB, que el sindicato califica como “una expropiación de los ahorros de los ciudadanos, indefensos ante las decisiones tomadas por autoridades económicas”.
En ese sentido, las “decisiones del FROB no van a contribuir a calmar los ánimos”, mientras “el enfado y la radicalización de las protestas van en ascenso”. Además, según recuerda UGT, “un gran número de empleados de Bankia y sus familias son tenedores de participaciones preferentes”.
Por ello, desde el sindicato se ha impulsado la creación del blog www.medeclaroinocente.com como “un llamada de ayuda, para que se detenga esta ola de violencia y agresividad contra las personas que trabajamos en el sector financiero”, y explicar a la sociedad que los trabajadores no son “los culpables de la crisis, y menos aún de las consecuencias que ésta ha originado para todos los ciudadanos”.
En la misma línea, el sindicato CSICA ha denunciado que el Gobierno permite “que las víctimas de las participaciones preferentes actúen impunemente contra los trabajadores de las entidades que comercializaron esos productos”, una actitud muy diferente que la que el Ejecutivo toma frente a los ‘escraches’ a los políticos, en los que se dan “respuestas desproporcionadas”.
En un comunicado en su blog oficial, el sindicato critica “esa doble vara de medir” y recuerda que los empleados del sector bancario “cumplimos, como profesionales que somos, con las directrices empresariales establecidas, bajo el amparo legal de las autoridades, en un marco de economía financiera que estaba supuestamente vigilado”.
El hecho de que los clientes se hayan visto afectados por las preferentes, “no implica que los trabajadores tengamos que soportar insultos, presiones e, incluso, agresiones físicas”, denuncian los representantes de los trabajadores, que añaden que los empleados de las entidades afectadas “también somos víctimas” porque, aproximadamente, el 40% de ellos son titulares de estos productos así como sus familias.
CSICA reclama “una respuesta contundente” de las autoridades porque “es necesario poner orden y cordura ante esta situación”.
Al mismo tiempo, según los cálculos de los sindicatos, desde que se inició la crisis y hasta el cierre de 2012, se habían destruido en el sector unos 35.000 empleos, a los que se sumarán aproximadamente otros 20.000 puestos de trabajo a partir de este año tras los nuevos rescates con dinero de Bruselas.
