La Plataforma de Afectados por las Preferentes de Caja España-Duero en Zamora se niega a aceptar un canje por acciones de Unicaja, solución que los mercados dan por hecha una vez que se concrete la fusión entre la entidad castellana y la andaluza.
“Nosotros no queremos ni acciones ni nada de eso, sólo nuestro dinero”, ha señalado José Luis Redondo, portavoz de la Plataforma, en unas declaraciones recogidas por Laopiniondezamora.es. Redondo ha defendido que “el resto son problemas de ellos. Ya nos fiamos una vez de los bancos y mira lo que pasó, no vamos a fiarnos otra vez”. Un escenario, por tanto, “para nada deseado”.
Los afectados por las preferentes de Caja España-Duero deberán armarse de paciencia si quieren recuperar sus ahorros. Unicaja, que podría absorber la entidad castellana este mismo mes si se cumplen los plazos previstos, saldrá a Bolsa en 2015 para dar liquidez a estos títulos, que serán canjeados por acciones de la andaluza, según publicó ayer Elconfidencial.com.
En este canje, los tenedores de las preferentes deberán soportar además una quita que rondará el 40%, en línea con el de otras entidades rescatadas. Tras el canje por acciones de Unicaja, los afectados pasarán a controlar un 20% de la nueva entidad.
Este descuento ha levantado también las críticas de la Plataforma de afectados, que ha señalado que “aunque nosotros queremos que la fusión salga adelante” esta quita es “muy elevada, mayor de la que esperábamos”. De hecho, Redondo ha apuntado que una posible salida sería que la quita que aplique Unicaja no supere el 5%.
Sólo en preferentes, sin incluir la deuda subordinada, Caja España-Duero tiene en circulación unos 416 millones de euros. No obstante, el total de títulos híbridos podría rondar los 1.400 millones de euros.
