Standard & Poor’s ha rebajado el rating a largo plazo de Novagalicia Banco a ‘BB-’, conocido como ‘bono basura’ en el argot financiero. Además, ha asignado una nota de ‘B’ para la deuda a corto plazo de la entidad, al tiempo que pronostica una ‘perspectiva negativa’ para la entidad bancaria.
La agencia de calificación destaca la “débil” posición de Novagalicia en el negocio bancario y y los “desafíos de reestructuración” que afronta, que considera que “no serán fáciles”.
S&P cree que la posición de negocio de la entidad es “moderada” e incide en que su core capital, situado en el 4,1% a cierre de 2012, mejorará con diferentes operaciones, como la quita a los tenedores de preferentes y deuda subordinada.
“Bajo el control del Gobierno español, la reestructuración del banco incluye una reorientación estratégica, una reducción de su capacidad de operaciones, y una reducción agresiva de sus operaciones fuera de su región principal, Galicia”, expone la agencia, que añade que el banco “funcionará casi exclusivamente en Galicia”, con una “concentración significativa regional de ingresos comparados con otras instituciones financieras domésticas que funcionan en España”.
