Los resultados de los primeros nueve meses de este ejercicio, presentados por la farmacéutica Almirall, muestran un comportamiento dual. Por un lado las ventas en el mercado interior se desploman un 28% y, a pesar que las ventas exteriores ya representan un 58% del total, no se consigue reconducir la caída que es del 10% en el período, hasta los 531 millones de euros.
Sin embargo, gracias a la partida ‘Otros ingresos’ el resultado neto final normalizado consigue mostrar unos números más ajustados, 91,4 millones, con una caída del 2,5%, que representa un beneficio por acción de 54 céntimos de euros, un céntimo más que en 2011.
El eje central del mantenimiento del negocio de la empresa, propiedad de la familia Gallardo, se encuentra en el detalle de ‘otros ingresos’ que pasó de suponer, en los primeros nueve meses del año pasado, 48 millones, a 142,6 millones el 30 de septiembre de 2012. El ingreso principal de esa partida incluye el pago de 84,6 millones procedentes de royalties que han pagado unos socios (fundamentalmente el americano Forest Laboratories) por el éxito del medicamento Eklira, un broncodilatador avanzado. Además, la venta directa de Eklira ya aporta 25 millones a la cuenta de resultados.
Por otro lado, apuntar que la franquicia dermatológica sigue creciendo suponiendo ya casi 100 millones de euros.
