El consejo de administración de Caja Cantabria dio ayer marcha atrás y decidió anoche facultar a sus representantes en la junta de accionistas de Liberbank para que apoyen la autorización al consejo del banco para ejecutar las medidas de recapitalización y cubrir los 1.198 millones de euros de déficit de capital detectados por la auditoría de Oliver Wyman.
Según publica La Nueva España, Caja Cantabria, que controla un 14% del banco, accedió también a acudir a una junta universal de accionistas, que podría convocarse sin aguardar plazo alguno y sin que sea necesario esperar a las juntas generales convocadas para el martes y para el 23 de noviembre.
Con esta autorización, se pone fin a la polémica después de que hace una semana Caja Cantabria rechazase dar su apoyo al plan de recapitalización del banco mientras no tuviese información sobre las medidas concretas de futuro previstas para la recapitalización.
Sin embargo, observadores del sector comentan que su negativa al plan de Manuel Menéndez era sólo un brindis al sol, ya que el porcentaje del banco que controla Caja Cantabria es de apenas un 14%. En otras palabras, Cajastur (66%) y Caja Extremadura (20%) controlan un 86% de los votos en la próxima junta de accionistas que se celebrará el próximo 30 de octubre, y sólo necesitarían un 75% para dar luz verde al proyecto.
Liberbank presentó a mediados de mes un plan de recapitalización al Banco de España para cubrir el agujero de 1.198 millones de euros detectado por la auditoría de Oliver Wyman. Sin embargo, poco se sabe de este plan, si bien se ha hablado sobre ahorro de costes en materia laboral, ventas de activos, y una posible salida a Bolsa.
