La negociación entre la dirección de Sabadell-CAM y los sindicatos para llevar a cabo el expediente de regulación de empleo (ERE) está en un momento crítico, y los representantes de los trabajadores contemplan tres escenarios base, con unos costes para la empresa que podrían oscilar entre los 190 y los 267 millones de euros.
Según señala Sicam, sindicato mayoritario en la entidad alicantina, en un comunicado, el asesor de la parte social ha trasladado a los sindicatos “de modo orientativo” tres escenarios diferentes: el primero de ellos contempla 900 prejubilaciones y 500 bajas incentivadas. En el caso de las prejubilaciones, el tope sería de 260.000 euros más indemnización por aportaciones adicionales periódicas, mientras que en las bajas incentivadas se ofrecerían 45 días por año más una prima de enganche de 15.000 euros. Este escenario supondría un coste para la empresa de 267 millones de euros.
El segundo escenario contemplado, con un coste de 190 millones de euros, contempla 700 prejubilaciones y 700 bajas incentivadas. En este caso habría un tope de 240.000 euros en las prejubilaciones y se pagarían 30 días por año en las bajas incentivadas.
Entre ambos extremos, aparece una tercera opción con un coste de 210 millones de euros y también 700 prejubilados y 700 bajas incentivadas. En el caso de las prejubilaciones, con un tope de 240.000 euros mientras que en las bajas se pagaría 45 días por año.
Con estos datos y teniendo en cuenta que, en todos los escenarios anteriores se alcanza la cifra de 1.400 empleos, requerida en estos momentos, “la parte social entiende que el coste de la primera opción es totalmente asumible por la entidad, siendo significativamente inferior a los costes medios del anterior ERE realizado en CAM”.
