El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha salido de la Cumbre europea que ha terminado este viernes satisfecho. No obstante, al ser preguntado por cómo ha logrado, junto con su homólogo italiano Mario Monti, conseguir que la canciller alemana, Angela Merkel, cambie de discurso y permita la recapitalización directa de los bancos españoles, el mandatario ha contestado que no es amigo de dar detalles.
La pregunta es interesante. Merkel aseguró hace unos días en Roma, tras un encuentro con Rajoy, Monti y el presidente galo François Hollande, que España debería garantizar la recapitalización de sus bancos. Y ahora, la ‘dama de hierro’ germana ha permitido que se haga lo contrario. Sin ir más lejos, el semanario alemán Der Spiegel ha titulado su edición digital este viernes de la siguiente manera: «Cómo Italia y España derrotaron a Merkel en la Cumbre europea».
La publicación alemana explica que hacia las siete de la tarde del jueves, Merkel y Herman Van Rompuy, presidente del Consejo Europeo, querían levantar la sesión sin haber hablado de la recapitalización directa de los bancos españoles ni de la posibilidad de que los mecanismos de rescate europeos puedan comprar deuda pública en los mercados secundarios para combatir así la presión de los especuladores sobre Italia y España. En ese momento, Monti montó en cólera y exigió a Van Rompuy que se sentase.
La tensión gobernó el encuentro hasta bien entrada la madrugada, y las fuentes que cita Der Spiegel explican cómo incluso la primera ministra de Dinamarca, Helle Thorning-Schmidt, llegó a preguntarle a Monti si debían considerarse rehenes. Ni Monti ni Rajoy parecían dispuestos a que nadie se levantase de la mesa sin que Merkel accediese a conceder los dos puntos arriba mencionados. Sin embargo, al preguntarle los periodistas españoles al presidente del Gobierno sobre este episodio, Rajoy se ha limitado a contestar que no es amigo de dar detalles sobre los procesos que llevan a un acuerdo, y que si ya es conocida su postura no deberían insistir en ello.
No obstante, el presidente sí ha matizado que no ha existido ningún tipo de presión por parte de España e Italia, y que el encuentro entre los líderes europeos se ha limitado a un debate: «Aquí todo el mundo plantea lo que cree conveniente y hay opiniones distintas». También ha recordado que hay que acercar las posturas de 27 países, lo cual es «complicado».
En la ronda de preguntas también se le ha preguntado sobre si ahora va a cesar el acoso de los mercados. Rajoy no ha querido contestar directamente la pregunta, limitándose a comentar que el acuerdo firmado es el mejor para asentar la solidez del euro a pesar de que existan etapas más o menos desagradables durante el viaje.
Durante su intervención, Rajoy ha recordado a su vez que «el Consejo Europeo ha marcado el camino correcto para hacer frente a la crisis y ha señalado una ruta clara» en el futuro de la divisa comunitaria. No obstante, ha matizado que hay que»seguir trabajando» y que todavía «queda mucho camino por recorrer». En este sentido, el Gobierno está comprometido con el avance en la consolidación fiscal, el saneamiento cuentas públicas y avanzar en reformas para modernizar.
