Banco CAM, la antigua Caja de Ahorros del Mediterráneo, ultima una emisión de cédulas hipotecarias por importe de 1.000 millones de euros y a un plazo de tres años. A la espera de que se concrete el traspaso de poderes al Sabadell, los administradores del FROB hacen acopio de activos líquidos a la medida del BCE.
Según publica Valenciaplaza, esta emisión de cédulas, que cuenta con el visto bueno del Banco de España, será absorbida por completo por la propia entidad alicantina, que se autocolocará los títulos para poder acceder a la barra libre del BCE.
La ‘autocolocación’ de cédulas o bonos se ha convertido en una práctica no demasiado extraña, ante las dificultades de los mercados mayoristas, que permanecen cerrados. La banca se ve obligada a acudir a las subastas de liquidez del organismo de política monetaria como prácticamente la única alternativa para poder obtener financiación, pero a cambio de ella debe ofrecer a la institución europea activos como garantía o colateral.
Algunas fuentes financieras cifran los vencimientos de la CAM en casi 9.000 millones de euros, aunque una vez que se complete el traspaso al Sabadell, el Banco de España se ha comprometido a cubrir parte de esta liquidez, dentro del esquema de protección de activos.
