CCOO, UGT y SECPB han convocado concentraciones de protesta para mañana cinco de marzo en Sevilla y Málaga tras el anuncio efectuado por la dirección de CaixaBank el pasado jueves de acometer una reestructuración de personal que afectaría a 3.002 personas, de las que los 743 serán de la antigua Banca Cívica, actualmente en situación de suspensión de contrato.
Dada la magnitud de la “agresión” que CaixaBank pretende hacer “contra su plantilla en general y contra este colectivo en particular [Banca Cívica], el cual ya ha sufrido un primer y gran perjuicio económico y laboral teniendo que suspender su relación laboral durante uno o dos años con la entidad”, es por lo que estos sindicatos han decidido convocar a dicho colectivo a participar en una primera medida de protesta para manifestar “el más enérgico rechazo” a la intención de la entidad.
“CaixaBank debe modificar radicalmente su planteamiento”, señalan los sindicatos, que consideran que “no es admisible que el personal en suspensión de contrato, que ya ha sufrido un grave perjuicio económico y laboral, sea ahora el colectivo más vulnerable al que se le impida volver a su puesto de trabajo”.
En la última reunión celebrada la semana pasada, la dirección manifestó que parte de los 3.002 afectados por la reestructuración lo forman el personal procedente de Banca Cívica que en estos momentos se encuentra en suspensión de contrato (743 personas), a lo que se añaden 352 personas de Servicios Centrales, 186 servicios territoriales y 1.721 red comercial (oficinas).
El banco de La Caixa, cerró 2012 con una plantilla de 32.625 personas, 5.632 más que el año anterior. Ese aumento en el número de empleados se debió a la adquisición de Banca Cívica y a las anteriores absorciones de Caixa Girona y de Bankpyme. A este número habrá que añadir los que se incorporen del Banco de Valencia este año, si bien la entidad levantina ya ha acordado una importante reducción de la plantilla de 890 empleados.
