Según los datos de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el principal tenedor de estos títulos es el consejero José Enrique Garrigós Ibáñez, con un 0,025% del total. El pasado nueve de mayo, última operación hasta el momento, Garrigós anunció la adquisición de 12.270 cuotas participativas, a razón de 1.799 cuotas a 4,89 euros y 10.471 a 4,90 euros cada uno.
Las cuotas de la CAM, que se han dejado cerca de un 30% en lo que va de año, cotizaban hoy con alzas superiores al 3,5% hasta acercarse de nuevo a los 5 euros por título, dentro de un mercado de renta variable español teñido de rojo, en el que el Ibex 35 se dejaba un 1% a la misma hora.
No es la primera vez que surge la polémica con las cuotas de la CAM, después de que la entidad que preside Modesto Crespo pagase ocho millones de euros del “excedente del ejercicio 2010” a un dividendo de 0,16 euros por cuota participativa, pese a la difícil situación que atraviesa.
La CAM lanzó en julio de 2008 cincuenta millones de cuotas participativas a un precio de 5,84 euros cada una, lo que le permitió captar 292 millones de euros, con un free float del 7,5%. Muchos de los títulos están en manos de empleados de la caja, especialmente entre sus consejeros y directivos
La caja busca a la desesperada un nuevo socio que le salve de ser intervenida por el Banco de España, hecho que se podría producir en apenas tres semanas si se cumplen los plazos que maneja la institución que gobierna Miguel Ángel Fernández Ordóñez.
Tal y como ya adelantó EL BOLETÍN, en menos de tres semanas el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) tendrá preparada la valoración de las cajas de ahorros que han pedido las ayudas públicas, y la intención del organismo dependiente del Banco de España es no perder ni un minuto para comenzar a inyectar el capital.
La CAM es la entidad que ha solicitado más ayudas al FROB, un total de 2.800 millones de euros, por lo que de no encontrar un socio se verá nacionalizada en la práctica. No obstante, en las últimas semanas han surgido varios rumores que apuntan a que habría algunos inversores interesados en invertir en ella. Entre los que se ha especulado, destaca Barclays, interesado en crecer en España.
El diario ABC publicaba hoy que la caja se encuentra en negociaciones avanzadas con un fondo estadounidense dispuesto a inyectar en torno a 1.000 millones de euros a un descuento mínimo del 55% sobre su valor en libros. Fuentes de la entidad se han limitado a señalar a EL BOLETÍN que “no hay ninguna puerta cerrada”.
