El presidente de BBVA, Francisco González, ha animado hoy a los clientes a que pidan préstamos. Durante su intervención en la Junta de Accionistas del banco celebrada en Bilbao, González ha asegurado que la entidad mantiene su compromiso de dar créditos a familias y empresas “para salir antes de la crisis”. “Tenemos capital y liquidez para atender la demanda de los clientes, pero no hay demanda”, ha afirmado el presidente del BBVA en Bilbao, que ha defendido asimismo que “nunca se cerró el grifo”.
Durante “toda la crisis BBVA ha mantenido la misma proporción de demandas atendidas de crédito sobre el total, en torno a un 75%”, ha querido recordar el presidente, que considera además que España será durante 2010 uno de los pocos países que tendrán todavía un “crecimiento negativo”, ya que la salida de la crisis “se ve dificultada por un déficit público “insostenible” y por un crecimiento “explosivo” de la deuda pública.
Por ello, González ha pedido que se lleven a cabo “con urgencia” reformas “estructurales de calado que mejoren la competencia e impulsen el crecimiento”, así como “un proceso creíble y sostenido” de saneamiento de las finanzas del conjunto de Administraciones Públicas.
Estas dos reformas deberán ser complementadas con “una reestructuración “profunda del sector financiero” español. Sólo un sistema financiero formado por “entidades solventes, estables y sujetas a controles apropiados” puede proporcionar a las familias y empresas el “crédito necesario” para apoyar el crecimiento.
González también ha criticado durante su intervención que en 2009, “los masivos apoyos públicos y las políticas monetarias extremadamente laxas han frenado la necesaria reestructuración del sector financiero” mundial. “Paradójicamente, estas medidas han permitido a muchas entidades obtener fuertes beneficios en las actividades de banca mayorista”, que no obstante considera “insostenibles”.
Frente a esto, BBVA “ha conseguido unos resultados muy sólidos, que dejan a nuestro grupo en una posición todavía más fuerte que al cierre del año anterior”, con un beneficio antes de extraordinarios de 5.260 millones de euros, un 2,8% menos que en 2008. Sin incluir el impacto de tipos de cambio, creció un 2%.
La Junta de Accionistas de BBVA ha aprobado un dividendo complementario de 15 céntimos por acción, con lo que el dividendo total se eleva a 42 céntimos por título, equivalentes al 30% del beneficio atribuido antes de extraordinarios y saneamientos (5.260 millones de euros). “Estoy convencido de que esta cifra será más alta en 2010”, ha adelantado González.
Durante su intervención, Francisco González ha querido enviar también “un mensaje de cariño y solidaridad” a Chile. “BBVA está firmemente comprometido con el bienestar y el desarrollo de todos los lugares donde trabajamos. Pero en estas circunstancias, pondremos todavía más empeño en apoyar la recuperación tras el desastre”, ha señalado.
Por su parte, el consejero delegado de BBVA, Ángel Cano, que intervenía por primera vez en una Junta de Accionistas tras acceder al cargo el pasado año, se ha referido durante su intervención al proceso de reestructuración y redimensionamiento del sector financiero. En este sentido, considera que “la solidez de nuestra franquicia en España nos hace pensar que podremos aprovechar las oportunidades derivadas de este proceso”. “2010 marcará el comienzo de una nueva etapa de crecimiento, con un objetivo claro de ganancia de cuota y mejoras de eficiencia”, ha señalado. Cano ha centrado su discurso en señalar que el banco “es hoy más eficiente, capitalizado, sólido y diversificado” que antes, lo que le otorga además una ventaja “ante los cambios regulatorios que están por venir”.
El consejero delegado también ha recordado que América del Sur ha sido “clave” en el crecimiento de BBVA en 2009. Tal y como ha destacado, esta región inició la recuperación económica a mediados de del segundo semestre del año y se encuentra en una senda de recuperación más sólida que las principales economías desarrolladas. A juicio de Cano, este hecho pone en valor que la diversificación geográfica del grupo constituye una ventaja competitiva. BBVA ganó en Sudamérica 871 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 21,8%.
En México, donde el grupo español opera con Bancomer, a pesar del escenario económico, con una caída del PIB del 6,8%, la franquicia “ha logrado fortalecer su posición de liderazgo y vuelve a mostrar unos sólidos resultados operativos”. BBVA logró un resultado atribuido de 1.359 millones de euros. En esta región, “la solidez de nuestra franquicia, las oportunidades de bancarización y las mejoras de productividad en la red” permiten “mirar al futuro con optimismo”.
