El juez condena a Hernández Moltó y al exdirector Ildefonso Ortega por un delito de falsedad contable. La Audiencia Nacional ha condenado al expresidente de Caja Castilla-La Mancha (CCM) Juan Pedro Hernández Moltó y al exdirector general de la entidad Ildefonso Ortega a una pena de dos años de prisión para cada uno de ellos por un delito societario de falsedad contable cometido al manipular las cuentas de la malograda caja, así como a su inhabilitación para ejercer cargos de administración o dirección en el sector financiero durante el tiempo de la condena.
El magistrado José María Vázquez Honrubia del Juzgado Central de lo Penal impone además a cada uno el pago de una multa de 29.970 euros -111 euros diarios durante nueve meses- y les obliga a satisfacer la mitad y a partes iguales las costas causadas, incluidas a las de la acusación particular y popular, ejercidas por la asociación Adicae y la propia caja de ahorros. No obstante, les absuelve del delito de administración fraudulenta.
CCM, ahora integrada dentro de Liberbank, fue la primera caja de ahorros en ser intervenida durante la crisis financiera. En concreto, en marzo de 2009 fue intervenida por el Banco de España entonces dirigido por Miguel Ángel Fernández Ordóñez, después de que se aprobara un rescate de 9.000 millones de euros.
La entidad, que atravesaba problemas ya desde hacía tiempo, había intentado escapar del rescate mediante una fusión con Unicaja, pero el proceso no llegó a buen puerto ante las reticencias de la andaluza. El Banco de España cuantificó en 253,8 millones de euros las operaciones y los perjuicios económicos que los gestores causaron en CCM.







