La entidad catalana pone en venta una nueva cartera de créditos problemáticos apenas unos días después de cerrar el traspaso de un paquete de 700 millones. CaixaBank acaba de lanzar a la venta una nueva cartera de créditos problemáticos de 900 millones de euros formada por créditos a promotores impagados (Proyecto Atalaya), según publica el diario Expansión.
Esta operación se lanza apenas unos días después de cerrar el traspaso de un paquete de 700 millones de euros al fondo Cerberus (esta venta, todavía pendiente de la firma definitiva, se enmarca dentro del Proyecto More). Desde 2014, el grupo ha negociado traspasar créditos fallidos y dudosos por unos 5.000 millones.
Los analistas de Ahorro Corporación señalan en un informe que se trata de una noticia positiva para la entidad. Esta venta encajaría en la estrategia de CaixaBank respecto a los activos improductivos, venderlos frente a su mantenimiento en balance, por su consumo de recursos, con un límite de pérdidas del 17% en inmuebles.
La entidad espera acelerar las ventas de real estate promotor por las ventas a institucionales, algo que hasta 2014 no había hecho. Más de un tercio del real estate que tiene la entidad está en grandes áreas. CaixaBank tiene en balance 7.009 millones en activos inmobiliarios adjudicados disponibles para la venta (valor contable neto), habiéndose reducido los activos problemáticos en el último año un 13%.
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CaixaBank acelera la venta de activos problemáticos