El déficit de las arcas públicas se elevó hasta los 62,780 millones de euros en los nueve primeros meses del año, lo que equivale al 5,96% del PIB y supone multiplicar casi por cinco el agujero de 13.507 millones de euros del mismo periodo del año pasado, según los datos presentados hoy por el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña.
El Gobierno ha atribuido este deterioro a la caída de la recaudación, el impacto de las medidas anunciadas por el Gobierno, que ascienden a más de 27.000 millones por reducciones de impuestos, anticipos de devoluciones y mayores aplazamientos, y otras iniciativas del Ejecutivo para fomentar el empleo y la inversión. Este déficit fue consecuencia de unos pagos que se situaron en 135.130 millones de euros, un 22,6% más, mientras que los ingresos sumaron 72.350 millones de euros, un 25,2% menos. Para final de año, el Ejecutivo prevé que el porcentaje de déficit se quede ligeramente por debajo del 10%.