Durante su visita a Catar, el expresidente Donald Trump declaró haber tenido un “pequeño problema” con Tim Cook, director ejecutivo de Apple, por la decisión de ampliar la producción de iPhones en la India. Trump afirmó:
“Te hemos tratado muy bien, hemos tolerado todas las plantas que estabas construyendo en China durante años (…) No estamos interesados en que construyas en la India, la India puede cuidar de sí misma”
Estas palabras, difundidas por el medio estadounidense Axios, reflejan el malestar del exmandatario con la estrategia industrial de una de las mayores empresas tecnológicas del país.
Apple apuesta por diversificar su cadena de suministro
En el marco de la guerra comercial entre EEUU y China, Apple ha iniciado una reorientación estratégica para depender menos de las fábricas chinas. Según declaraciones recientes de Tim Cook, la mayoría de los iPhones vendidos en EEUU entre abril y junio serán fabricados en la India.
Fuentes del sector aseguran que el país asiático ofrece infraestructura adecuada y capacidad técnica para producir modelos avanzados como el iPhone Pro y Pro Max, aunque en volúmenes menores que en China.
Apple ya fabrica parte de los modelos premium de iPhone en la India, una estrategia que busca reducir la exposición a conflictos geopolíticos y responder a exigencias de diversificación industrial
Contexto geopolítico y económico
La postura de Trump pone de manifiesto la tensión existente entre el discurso nacionalista industrial en EEUU y la realidad de la globalización tecnológica. La India se ha posicionado como un actor clave en las nuevas cadenas de producción, atrayendo inversiones que antes estaban concentradas en China.
Además, esta situación plantea un dilema para Apple, que intenta equilibrar eficiencia, costos y relaciones políticas en sus decisiones logísticas y estratégicas.