La última actualización de la radiotelevisión pública de Portugal (RTP) apunta a 42 muertos por culpa de los incendios que la semana pasada asolaron el país vecino. En lo que va de año son casi un centenar los fallecidos por esa misma causa, una crisis sin precedentes que ha provocado la dimisión de la ministra de Interior del gobierno luso.
Constança Urbano de Sousa ha dejado de ser la responsable de la administración interna de Portugal por “dignidad personal”. Tras lo sucedido este fin de semana en Pedrogâo, donde fallecieron decenas de personas, Urbano de Sousa solicitó al primer ministro luso, Antonio Costa, que aceptara su dimisión.
“A pesar de que la tragedia pudo ser fruto de múltiples factores, consideré que no tenía condiciones políticas ni personales para continuar en el ejercicio del cargo”, han sido sus palabras en una carta dirigida al primer ministro.
Antonio Costa ha aceptado la dimisión oficial de una ministra que extraoficialmente estaba en funciones desde el pasado verano, cuando otra oleada de incendios acabó con la vida de 65 personas. Eso es lo que desvela ahora la propia ministra, que no quiso hacer pública su petición de dimisión “por cuestión de lealtad” y a la espera de que Costa encontrara un sustituto.
Esta es ya la cuarta alteración en la composición del Gobierno portugués, que comenzó con la rápida dimisión del ministro de Cultura, Joâo Soares.
