La cifra de negocio de Deutsche Bank ascendió a 8.524 millones de euros, un incremento del 9,6% interanual, a pesar del leve retroceso del 1% en los ingresos del área de banca corporativa, que aportó 1.866 millones. En contraste, la banca de inversión registró un crecimiento del 10%, hasta 3.362 millones de euros, y la banca privada aumentó un 3%, con 2.439 millones. La gestión de activos fue el segmento más dinámico, con un alza del 18% hasta alcanzar los 730 millones.
El sólido comportamiento de las áreas de inversión, banca privada y gestión de activos impulsó los ingresos globales del grupo un 9,6% interanual
A pesar del entorno complejo, el banco provisionó 471 millones frente al riesgo de crédito, un 7% más que en el primer trimestre de 2024, mostrando una postura prudente ante posibles impagos.
Balance robusto y liquidez en máximos
El ratio de capital CET1 se mantuvo en el 13,8%, claramente por encima del 13,4% de hace un año, y muy por encima del mínimo exigido por los reguladores. Asimismo, la ratio de cobertura de liquidez alcanzó el 134%, frente al 131% del trimestre anterior, generando un superávit de 58.000 millones de euros respecto al umbral del 100%.
Los depósitos de clientes alcanzaron los 665.000 millones de euros, sin apenas cambios respecto al trimestre previo, pero por encima de los niveles de hace un año, reflejando la confianza del mercado en la entidad.
Aumento del dividendo y plan de recompra de acciones
Deutsche Bank anunció que propondrá en su junta del 22 de mayo un dividendo en efectivo de 0,68 euros por acción, un 50% más alto que el año anterior. Esta medida forma parte de un paquete de distribuciones de capital por 2.100 millones de euros en 2025, que incluye un reciente programa de recompra de acciones por valor de 750 millones.
El banco premiará a sus accionistas con un dividendo histórico y una recompra de acciones, reforzando su política de retorno de capital
Liderazgo europeo frente a la banca estadounidense
El consejero delegado, Christian Sewing, destacó el buen desempeño operativo y la mejora de la rentabilidad. La ratio de costes sobre ingresos cayó al 61,2%, frente al 68,2% del año pasado, mientras que la rentabilidad sobre el capital tangible (RoTE) subió al 11,9%.
Sewing subrayó que cada vez más clientes internacionales buscan alternativas europeas a la banca de EEUU, en un contexto en el que los gobiernos del continente están más dispuestos a proteger la competitividad y seguridad financiera. Deutsche Bank aspira así a consolidarse como el banco líder en Europa, respaldado por su tamaño, solidez y estrategia a largo plazo.