El Ministerio de Sanidad tiene nueva responsable: María Luisa Carcedo. Y la nueva ministra ya ha contado con el visto bueno de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP): “Este nombramiento es muy positivo”. Aun así, estos defensores de la sanidad pública han recordado que “no lo tiene fácil”.
Tras la destitución de Carmen Montón, el Gobierno de Pedro Sánchez miró a quien dirigía el alto comisionado contra la pobreza infantil para adjudicarle el puesto de ministra de Sanidad. Ahora la FADSP ha bendecido el nombramiento al tratarse de “una profesional sanitaria con conocimientos suficientes”.
Según la FADSP, Carcedo cuenta con la suficiente “experiencia como profesional de Atención Primaria y en gestión sanitaria” como para valorar como “altamente positiva” su elección. Y más al ver el contraste de la nueva ministra de Sanidad con los predecesores que escogía el PP: “Ellos contaban con notoria incapacidad y desconocimiento sobre el sistema sanitario”.
En todo caso, el colectivo ha querido trasladar a Carcedo que “tiene por delante ingentes tareas como son el acabar con las exclusiones y barreras económicas en el acceso a las prestaciones sanitarias, controlar y racionalizar el gasto farmacéutico y acabar con las privatizaciones”.
Por ello, la FADSP ha deseado que la nueva ministra aborde estos retos “con la firmeza, rigor y tenacidad necesarias”. Por último, han reflexionado que la salida de Montón “era inevitable” pero reconociendo que “en sus 96 días ha hecho más cosas positivas por la sanidad que sus tres predecesores en siete años”.
“Es de justicia reconocer su labor positiva en el ámbito sanitario, tanto en el Ministerio de Sanidad como en la Consejería de Salut de Valencia”, han concluido desde la FADSP, en referencia a la ya exministra de Sanidad.
