Según los expertos, no existe un consenso mundial sobre las estrategias de estas pruebas, combinadas con medidas sólidas de salud pública
Según los expertos, no existe un consenso mundial sobre las estrategias de estas pruebas, combinadas con medidas sólidas de salud pública, como la cuarentena y el rastreo de contactos. Sin embargo, la realización de test fuera de los entornos sanitarios se ha realizado a una escala sin precedentes.
Ante esta situación, un equipo internacional de científicos ha publicado una revisión en The Lancet sobre los puntos fuertes, los débiles y las aplicaciones de las diferentes pruebas covid-19, así como su potencial para la gestión de la pandemia ya que los diagnósticos han demostrado ser claves en la respuesta a la pandemia.

Tres pruebas para contextos diferentes
Hay tres métodos principales para la detección de la infección por el SARS-CoV-2 y su papel ha evolucionado durante el curso de la pandemia. Las pruebas moleculares, como la PCR, son muy sensibles y específicas para detectar el ARN viral, y la OMS las recomienda para confirmar el diagnóstico en personas sintomáticas y para activar las medidas de salud pública.
Los tres tipos de pruebas covid-19 siguen teniendo un papel crucial en la transición de la respuesta a la pandemia al control de la misma
Estas pruebas se pueden utilizar como herramienta de salud pública para el cribado de personas con mayor riesgo de infección, proteger a las personas clínicamente vulnerables, garantizar la seguridad de los viajes y la reanudación de las actividades escolares y sociales, y permitir la recuperación económica, señalan los autores del trabajo.
Con el despliegue de la vacuna, las pruebas de anticuerpos o serológicas (que detectan la respuesta del huésped a la infección o a la vacunación) pueden ser herramientas de vigilancia útiles para informar a las políticas públicas. Sin embargo, no deben utilizarse como prueba de inmunidad, ya que los correlatos de la protección siguen sin estar claros.
El estudio concluye que los tres tipos de pruebas covid-19 siguen teniendo un papel clave en la transición de la respuesta a la pandemia al control de la misma.