Los instaladores de telecomunicaciones aseguran que no pueden calcular el coste del dividendo digital Las empresas instaladoras de telecomunicaciones se han visto hasta este momento imposibilitadas para calcular el coste que supondrá para los hogares españoles la aplicación del dividendo digital. Se trata del precio que habrá que gastar para poder seguir viendo la televisión sin problemas a partir del 1 de enero de 2015, tras la decisión de distribuir la señal del 4G de los móviles a través de la red de Televisión Digital Terrestre (TDT).
El sector, representado por FECOTEL (Federación Coordinadora de Telecomunicaciones), asegura que es “imposible” disponer de cifras hasta que no vea la luz el nuevo Plan de Frecuencias del Gobierno Central para asignar nuevos puntos de sintonización a los canales de televisión.
El coordinador de las empresas instaladoras de Telecomunicaciones en España, FECOTEL (Federación Coordinadora de Telecomunicaciones), Fernando Flores Fernández, cree que “facilitar en estos momentos una cifra media por hogar” para calcular el coste del dividendo digital para los consumidores y usuarios en España “es básicamente imposible, o simplemente se trataría de una temeridad. Nos vemos imposibilitados para dar una cifra. Para poder hacer ese cálculo -explica- las empresas deberíamos conocer en qué medida el dividendo digital afectará al cuadro de frecuencias en cada zona de España”.
Flores Fernández añade que en cada área de la península las frecuencias que se emplean para disfrutar de la oferta de la TDT es diferente. “Cuando entre en vigor el dividendo, donde hoy sintonizamos un canal, ya no estará porque ahí podría haber una señal de telefonía móvil. Tenemos que conocer -agrega- cómo queda finalmente la reasignación de los canales. Sin eso es imposible hacer ningún tipo de cálculo, ni tan siquiera aproximado. Cuando conozcamos el nuevo Plan de Frecuencias del Gobierno, entonces podremos comenzar a hacer cuentas”.
FECOTEL considera una “insensatez” los últimos datos de coste aparecidos en medios de comunicación en los últimos días. “Es todo un lamentable error que podría provocar grandes problemas en el futuro próximo con los presupuestos”, matiza su coordinador. Según los cálculos del Gobierno, los usuarios pagarán al menos 20 euros por resintonizar
La patronal de las televisiones no comparte los cálculos del Ejecutivo. Según Uteca, el coste por familia podría alcanzar los 200 euros y afectará a unos 11 millones de hogares.
¿Cómo se adapta una instalación doméstica al dividendo digital?
A propósito del dividendo digital, el trabajo de las empresas instaladoras de telecomunicaciones para instalaciones de viviendas unifamiliares consistirá en colocar una nueva antena que sólo capte aquellas señales que provienen de la TDT y discrimine la frecuencia 4G. De esa forma sortearemos el primer escollo de interferencias de señales en la primera etapa: la captación de la señal.
Los instaladores además deberán sustituir los sistemas de amplificación para que vuelvan a filtrar la señal que les llega de la antena, por si ésta ha captado de forma irregular una señal 4G. Con ello impiden la canalización de una señal no deseada a través del cable que llega a nuestro televisor y de esa forma logran “limpiar” el segundo punto donde se pueden localizar posibles interferencias.
Cuando se trata de la señal en edificios de comunidades de vecinos, los trabajos serán más o menos costosos dependiendo del tipo de amplificador que tenga instalado.
Así, los amplificadores (cabeceras) que a buen seguro deberán ser sustituidos serán los denominados de “banda ancha” y las “centrales programables” porque carecen de la versatilidad suficiente como para poder regular la intensidad de los canales que llega a través de la antena. Si la intensidad es muy pobre o está fuera del rango de saturación, no se verá la televisión.
Sólo las denominadas “cabeceras amplificadoras modulares o monocanal” podrán subsistir a la aplicación del dividendo digital porque permiten regular el nivel de señal de forma individual para cada canal.







