El pianista cubano se consolida como el ‘maestro’ favorito de la afición al género en la capital de España. “No diga jazz latino diga ‘Caramelo’. Seguro que los aficionados madrileños a esa música rítmica y adictiva que mezcla Nueva Orleans con el Caribe no tienen ningún problema en que me haya apropiado de esa frase hecha, de origen futbolístico, para describir la identificación total que existe entre este pianista cubano y la música que practica.
Es un maestro indiscutible, pero muy cercano. A Chick Corea o a Chucho Valdés hay que verles en la distancia de los grandes teatros y los auditorios repletos. Con ‘Caramelo’, o ‘Caramelo de Cuba’, como le denominaba el gran cantaor ya fallecido Enrique Morente que fue compadre suyo, uno se puede tropezar un día cualquiera en un club cualquiera. Y alucinar, claro.
Porque Javier Gutiérrez Massó, que es el nombre real de este músico imprescindible, es un lujo que aún podemos permitirnos los seres terrenales que aspiramos a disfrutar de esta gran música en las distancias cortas. En esos viejos ‘antros’ de perdición, ahora por fin sin humo, sobre cuyos escenarios pequeños aún surge cada día la verdadera magia.
Y eso pasa, casi siempre, cuando Caramelo desliza sus manos sobre las teclas blancas y negras y empieza a serlas sonar. En el Café Central, en el Bogui o en cualquier otro local de estas características. Ya lo haga solo o en compañía de otros músicos afines, en esa variedad de formaciones, cuartetos o sextetos en los que se prodiga.
Aunque tampoco conviene perderse su trabajo cuando se convierte en ese acompañante perfecto que todo líder de banda de jazz, o de salsa, o de pop, quiere tener en sus filas. O cuando se asocia con otros francotiradores de calado, como Jorge Pardo o Jerry González y juntos se pierden por los vericuetos más inesperados de la improvisación total.
Esta semana ‘Caramelo’ forma parte del cartel de un festival más que recomendable en el que la SGAE a reunido a un grupo excepcional de músicos cubanos que viven y trabajan en Madrid. Se llama ‘Cuba en la Memoria’, se celebrará en la Sala Berlanga y , además de este gran pianista contará con la participación, entre otros, de Dayan Abad y Melli Music Project. ¿Se puede pedir más? Allí nos vemos.
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Caramelo, la referencia ‘madrileña’ del jazz latino
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