La escuela de primaria St Patricks cree que se debe enseñar a los niños a “ser cautelosos desde una edad temprana” y a “respetar el espacio personal”. La escuela australiana de primaria St Patricks, situada en la ciudad de Geelong, ha adoptado una polémica medida que ha dado la vuelta al mundo: prohibir los abrazos en el centro. El objetivo, según informa el diario local ‘Herald Sun’ y recoge El Periódico, es “enseñar a los niños a ser cautelosos desde una edad temprana” y “respetar el espacio personal”.
El director del centro asegura que no se castigará a los alumnos pero sí que les aconsejan que utilicen otras formas de mostrar afecto. “Se puede dar un apretón de manos, chocar los nudillos como una forma sencilla de decir ‘bien hecho’”, defiende el director de la escuela, que añade que quiere “animar a todos a respetar el espacio personal porque no todo el mundo se siente cómodo con ser abrazado”.
Junto a esta información, el ‘Herald Sun’ recoge el testimonio de un padre de un alumno al que no le ha gustado la iniciativa: “Tengo estudios en psicología y el tacto y los abrazos son básicos en las relaciones humanas”, apunta.
