Desde que empezó el proceso para desguazar la televisión pública de la Comunidad Valenciana son cinco los liquidadores que han dimitido de su cargo. La liquidación de la televisión pública valenciana está resultando más costosa de lo que había previsto el Gobierno, ahora en funciones, del popular Alberto Fabra. Dos de los tres liquidadores a los que se había encomendado el desmontaje de RTVV han anunciado su dimisión. Antes que ellos, otros tres hicieron lo mismo.
En esta ocasión, los dos liquidadores a la fuga son Enrique Blasco y José Vicente Hernández, según informa Valencia Plaza. Se prevé que se informe de estas nuevas dimisiones en el pleno del Consell a celebrarse este viernes. En el caso del primero, su paso por el proyecto de desmontaje ha sido casi fugaz, pues fue nombrado el pasado mes de enero, precisamente en sustitución de otro huido: Carlos Pérez-Marsá.
Desde que empezó el proceso de liquidación, tan solo permanece en el equipo Carlos Cervantes. El propio Pérez-Marsá tan solo permaneció en el proyecto durante tres meses. A la espera de que lleguen nuevos relevos, el proceso de extinción de RTVV se paraliza de nuevo en plena resaca electoral, si bien hace tiempo que no se conocían novedades sobre el procedimiento.
La incierta situación en la que queda la Generalitat Valenciana tras los comicios del pasado domingo, como otros muchos gobiernos autonómicos, suponen además otro obstáculo en el proceso. Mientras que el PP había dejado la puerta abierta a refundar un nuevo ente público de las cenizas de RTVV, desde Compromìs se había insistido en varias ocasiones en la necesidad de paralizar el proceso para llevar a cabo simplemente una profunda reestructuración.
