Si su representante ganara, podría volver a participar en el festival pero no organizar el evento. La Unión Europea de Radiodifusión (UER) ha anunciado que Australia participará como país invitado en la final de Eurovisión que se celebra el próximo 23 de mayo en Viena. Sólo si su representante gana el certamen, podrá volver a participar aunque no podrá ser sede del festival.
Australia tendrá hasta el 16 de marzo para elegir a su candidato, el mismo plazo que el resto de países. “Con la participación de Australia hemos logrado, junto a nuestros socios, la UER y la televisión australiana SBS, elevar (el festival) a un nivel nuevo y global, y tender un puente más”, ha señalado el director general de la ORF, Alexander Wrabetz, en un comunicado recogido por Efe. Para el director de la UER, Jon Ola Sand, se trata de “un paso valiente e increíblemente emocionante”.
Del total de 40 países que compiten este año, España, Italia, Francia, Reino Unido, Alemania, Austria y Australia están clasificados directamente para la final, y los demás competirán en las dos semifinales -19 y 21 de mayo. Este año España podrá votar en esta fase.
