Las autoridades chinas han registrado en las últimas 24 horas tres nuevos casos de COVID-19, todos ellos correspondientes a personas llegadas de otros países, lo que eleva a 83.043 el balance provisional de positivos en el país donde supuestamente surgió la pandemia en 2019.
El Ministerio de Sanidad chino ha informado este martes de dos casos en la provincia de Cantón y uno en la de Sichuán. Hubei, la región donde se originó el virus, no ha registrado ningún nuevo infectado, aunque sí se mantiene como la más afectada a nivel nacional con más de 68.100 casos.
Las autoridades chinas no tienen constancia de ninguna muerte adicional por COVID-19, por lo que el recuento de fallecidos se mantiene en 4.634. Además, una de las 58 personas que aún son consideradas casos activos en China se encuentra en estado grave, informa la agencia de noticias oficial Xinhua.
Pekín ha defendido en estos últimos meses su gestión de la crisis sanitarias, especialmente frente a las críticas de Washington, que ha acusado incluso a la Organización Mundial de la Salud (OMS) de tener un sesgo a favor del gigante asiático.
La pandemia del nuevo coronavirus ha dejado hasta el momento más de 406.000 víctimas mortales y más de 7,1 millones de personas contagiadas en todo el mundo, según el último balance publicado este martes a primera hora por la Universidad Johns Hopkins.
