La tensión comercial entre China y Estados Unidos vuelve a escalar tras la reciente imposición de aranceles anunciada por Donald Trump, con una tasa mínima del 10% pero que alcanza hasta un 34% para los productos chinos. Pekín reaccionó de inmediato, calificando la acción como discriminatoria y advirtiendo sobre las consecuencias negativas para la economía internacional y los esfuerzos globales para alcanzar el desarrollo sostenible.
China califica los aranceles como discriminatorios y dañinos
El portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Lin Jian, aseguró que los nuevos aranceles estadounidenses constituyen una clara violación del principio de no discriminación que rige la Organización Mundial del Comercio (OMC). Según el diplomático, esta política comercial «provocará inevitablemente una oposición generalizada de la comunidad internacional».
China advierte que los aranceles discriminatorios dañarán gravemente la estabilidad de las cadenas globales de suministro
Impacto negativo en la economía global
Lin Jian destacó que la implementación de estos nuevos aranceles causará «graves daños al orden económico y comercial internacional», afectando directamente la seguridad y estabilidad de las cadenas industriales y de suministro globales, así como al sistema de comercio multilateral.
Asimismo, alertó sobre las repercusiones negativas sobre la recuperación económica global, aún frágil tras años marcados por crisis y conflictos comerciales.
Profundización de la brecha económica global
El diplomático chino denunció también que la imposición selectiva de tarifas por parte de Estados Unidos perjudicará especialmente a los países del Sur global, agravando aún más la desigualdad económica mundial. Según los análisis realizados por la OMC, estas medidas comerciales ampliarán la brecha entre países ricos y pobres, dificultando los objetivos marcados en la Agenda 2030 de Naciones Unidas para el desarrollo sostenible.
Según China, los aranceles impulsados por EEUU profundizarán la desigualdad económica global y perjudicarán especialmente a los países menos desarrollados
China responde con contramedidas
La reacción china no se hizo esperar. El pasado viernes, Pekín anunció oficialmente una demanda contra EEUU ante la OMC, denunciando la ilegalidad de los aranceles «recíprocos». Simultáneamente, el Consejo de Estado chino impuso una tarifa adicional del 34% a todos los productos importados desde Estados Unidos, marcando un nuevo capítulo en la guerra comercial entre las dos mayores economías del planeta.