La decisión supone un paso más en el proceso de desdigitalización parcial del sistema educativo catalán. Desde hace años, el uso del móvil está vetado en primaria. Con el nuevo plan, esa misma restricción se extenderá a la Educación Secundaria Obligatoria (ESO), eliminando la posibilidad de utilizar el dispositivo incluso con fines educativos y bajo supervisión docente.
“No se podrá usar el móvil en secundaria ni siquiera para actividades pedagógicas”, sentenció la consellera Niubó durante la presentación del plan
El veto alcanza también a otros dispositivos como los relojes inteligentes, que quedarán totalmente prohibidos en las aulas. La franja afectada será la de alumnos de 12 a 16 años.
Adiós progresivo a las pantallas en infantil
El Plan de Digitalización Responsable también introduce nuevas restricciones en la etapa infantil (3 a 5 años). A partir del próximo curso, se aplicará una reducción progresiva del uso de tabletas y pizarras digitales en los niveles de educación infantil, con el objetivo de proteger el desarrollo cognitivo y emocional del alumnado.
Niubó recalcó que el plan ha sido elaborado con el asesoramiento de un comité de expertos que ha trabajado en propuestas para equilibrar los beneficios de la tecnología con la necesidad de establecer límites adecuados según la edad.
Influencers, TikTok y salud mental: el trasfondo del veto
La decisión llega en un contexto de preocupación creciente por el impacto de las pantallas en la salud mental y el bienestar del alumnado. En los últimos años, se ha multiplicado el número de estudios que alertan sobre los efectos negativos del uso excesivo de móviles, especialmente en adolescentes.
La Generalitat considera que limitar su uso en los centros educativos ayuda a combatir la distracción, el acoso escolar y la dependencia digital. La imagen de jóvenes pendientes de TikTok o de influencers en el aula se ha convertido en una señal de alarma para las autoridades educativas.
“Queremos recuperar espacios libres de pantallas en las escuelas”, subrayó Niubó
Un cambio que se extiende por España
Cataluña se suma así a una tendencia que gana fuerza en otras comunidades autónomas. Regiones como Galicia, Madrid o Castilla-La Mancha han anunciado o ya aplicado restricciones similares, aunque en muchos casos permiten aún usos pedagógicos puntuales.
El nuevo plan catalán establece un marco claro y restrictivo que elimina cualquier ambigüedad: nada de móviles ni siquiera con fines educativos.