Francisco Camps aterrizaba este miércoles en la Audiencia Nacional para declarar por la Gürtel valenciana. Apenas 24 horas después de su intervención en el Congreso de los Diputados, el expresidente valenciano ha mencionado un nuevo nombre en la trama: Eduardo Zaplana. El antiguo dirigente ha desvelado que en 2002 el entonces presidente de la Generalitat Valenciana envió al acusado Álvaro Pérez, el Bigotes.
En concreto, según ha apuntado Camps, la llegada de Pérez sirvió para que se empezara a encargar del montaje de los actos del partido. Al mismo tiempo, el valenciano se ha encargado de descargar responsabilidades en Ricardo Costa afirmando que “el día a día del partido lo llevaba Costa”.
“Todos confiábamos en el secretario general”, ha aseverado, aunque Camps ha respondido que no sabe quién llevaba los temas económicos pero ha supuesto que el secretario general “es el que llevaba la llevanza económica del partido”. No obstante, el exdirigente que él “nunca jamás” se reunió con empresarios ni les ordenó que pagasen actos electorales del PP.
De hecho, ha declarado que niega “la mayor”: “Jamás habría defendido o permitido un sistema de este tipo”. Pese a ello, Camps ha apuntado que Costa nunca le dijo que el partido estaba pagando la deuda contraído con la Gürtel con facturas falsas a empresarios. En este sentido, ha recordado una conversación que tuvo con su secretario general.
Camps ha rememorado que cuando “saltó esta cuestión”, rápidamente “llamé al señor Costa para decirle ‘qué es lo que está pasando’ y me dijo: ‘No te preocupes, presidente, esto está perfectamente ordenado. Son falsedades’”. Aun así, ha destacado que en el PP “nadie se ha enriquecido nunca jamás”.
