La Comisión Europea mantiene la presión sobre Italia, a la que pide un ahorro adicional de entre 2.500 y 3.000 millones de euros, según ha publicado hoy el Corriere della Sera, que señala que esa es la reclamación que Bruselas exige a Roma a cambio de aprobar sus presupuestos de 2019.
Italia envió ayer una versión modificada del polémico presupuesto rechazado por el Ejecutivo Comunitario. Según Corriere della Sera, un portavoz del ministro de Economía, Giovanni Tria, dijo el lunes que estaba trabajando para llegar a un acuerdo a lo largo del día.
Según el diario italiano, Tria le había dicho al vicepresidente de la Comisión de la UE, Valdis Dombrovskis, en una llamada telefónica que los viceprimeros ministros Matteo Salvini y Luigi Di Maio, de la Liga Norte y Movimiento Cinco Estrellas, respectivamente, se oponían a nuevos recortes porque no querían que el objetivo de déficit del próximo año cayera por debajo del nivel revisado del 2,04%.
La propuesta original de Italia preveía un déficit equivalente al 2,4% del Producto Interior Bruto (PIB) en 2019, por encima del 1,8% de este año. El plan revisado presentado la semana pasada bajaba la meta de déficit al 2,04%.
