El juez Manuel García Castellón imputó hace dos años ya a BBVA como persona jurídica por supuestos delitos de cohecho, descubrimiento y revelación de secretos y corrupción en los negocios. Pero el caso no ha dejado de dar titulares: esta misma semana el magistrado acordaba investigar también al dircom del banco, Paul García Tobin, al tiempo que imputaba un nuevo delito de administración desleal al ex presidente Francisco González.
Ante esta situación, Genç ha asegurado que “nuestra prioridad es la plena colaboración con la justicia en el esclarecimiento de los hechos”. Además, “no hemos visto ni siquiera en los momentos más álgidos un impacto sobre la reputación ni sobre el negocio”.
El banquero ha descartado asimismo que el reciente expediente de regulación de empleo (ERE) haya tenido impacto sobre esta reputación, así como algún otro ajuste en la plantilla a corto plazo. “No estamos pensando en futuros ERE”, ha defendido. “La prioridad a corto plazo es volver a centrarnos en el negocio, en crecer y en los clientes”.
BBVA registró un beneficio atribuido de 1.911 millones de euros durante el primer semestre de este año, frente a las pérdidas de 1.157 millones del mismo periodo de 2020, consecuencia del impacto de la pandemia, según ha informado este viernes la entidad.
