Así lo ha anunciado este miércoles el Ejecutivo regional en una nota, en la que detalla que entre las actuaciones “en esta emblemática” parada del suburbano destaca un “notable incremento” del espacio. Pasará de los 4.843 metros cuadrados actuales a 12.481 y se instalarán 12 nuevos ascensores y 24 escaleras mecánicas. También se renovarán los acabados arquitectónicos, con avances tecnológicos que “mejorarán el servicio y la experiencia del usuario, a la vez que se optimiza la eficiencia y el mantenimiento”.
Además, continúa la Puerta del Sol, el nuevo diseño “permitirá responder más eficazmente a la afluencia de viajeros, especialmente alta en los días de partido, y que previsiblemente se incrementará tras la remodelación que convertirá al Estadio Santiago Bernabéu en un referente por la organización de eventos culturales, de ocio y de entretenimiento en la capital y en Europa”.
“Estos trabajos se coordinarán con los de urbanización que acometerá el Real Madrid en el entorno de la Plaza de Lima, el aparcamiento, el nuevo carril bici de la Castellana y el resto de servicios preexistentes”, apunta la Comunidad.
Desde el Gobierno de Ayuso se incide en que esta parada del Metro “guarda una estrecha relación con el estadio del Real Madrid desde sus orígenes”. “Tanto es así que, aunque fue inaugurada en 1982 bajo el nombre de Estación de Lima, en 1998 fue renombrada como Santiago Bernabéu, dado que un buen número de los usuarios parten del recinto deportivo o se dirigen al mismo”.
Por ello, entre las actuaciones previstas a realizar se incluye un “nuevo diseño del espacio interior que refleje la particular relación entre la estación y el campo del Real Madrid, emblema deportivo de la capital y un gran punto de atracción turística”.