«El sistema financiero global de hoy está sobrecargando las desigualdades y la inestabilidad», dijo Guterres.
Además, dijo que el sistema actual permite a las agencias de calificación crediticia socavar la capacidad de los países en desarrollo con buenas perspectivas de crecimiento para pagar la deuda y abordar sus necesidades de desarrollo.
“Mientras tanto, las desigualdades siguen aumentando. La agitación social y la polarización siguen creciendo (…) Este es un polvorín para el malestar social y la inestabilidad representa un peligro claro y presente para las instituciones democráticas”, dijo Guterres.
Además, dijo que por estas razones es hora de asumir la necesidad de reformar el sistema financiero internacional
