La de los aceites ha sido la subida más destacada, pero no la única. Las frutas frescas se han encarecido en conjunto un 4,6%, mientras que los huevos han subido un 3,5%. También son reseñables los avances de un 3% en los precios de la carne de ave y de un 2,3% en las patatas.
En el lado opuesto, algunos grupos de alimentos se han abaratado en los siete primeros meses del año. Entre ellos destacaron el azúcar (-1,8%), las legumbres y hortalizas frescas (-1,3%) y el pescado fresco y congelado (-1,2%).