Cuestión distinta es que presentarse a la investidura quede fuera de su alcance porque necesitaría que le propusiera el presidente del Parlament. En todo caso, sólo podría ser investido con votos de formaciones independentistas cuyos miembros se comprometió a excluir de su hipotético gobierno. O sea, lo que ayuda a ganar es un inconveniente, lograda la victoria.
La reprobación de García Ortiz se incluía en una moción promovida por el PP en la que insta al Gobierno a proponer la destitución…