La polémica generada ayer en la Cumbre europea por las expulsiones masivas de gitanos rumanos que está realizando Francia han sido el asunto estelar de las tertulias de Onda Cero y la SER, que han girado en torno a la bronca entre Nicolas Sarkozy y el presidente de la Comisión Europea, Durao Barroso, después de que la comisaria de Justicia, Viviane Reding, comparara dichas expulsiones con las deportaciones de la II Guerra Mundial. En Onda Cero los tertulianos estuvieron de acuerdo con Casimiro García-Abadillo en la crisis de liderazgo que sufre Europa, pero también el gran poder francés, lo que hizo que el vicedirector de El Mundo dijera en broma que no estaría mal ser de mayor presidente galo. El resumen lo hizo Nicolás Redondo al señalar: “Francia es europeista a cambio de que Europa sea muy francesa”.
Mucho más duros con Sarkozy fueron en la SER Román Orozco y Mariola Urrea. A Orozco le parece lamentable que los 27 desautoricen a Reding “por decir la verdad” y aclaró que la comisaría “no ha comparado a Sarkozy con los nazis, simplemente ha dicho que la deportación masiva en Europa por motivos racistas no se daba desde la Segunda Guerra Mundial, lo cual es verdad” y culminó diciendo lo entristecido que estaba de que “24 de los 27 jefes de Estado sean de derechas o de extrema derecha”. Más comprensivo fue José Ignacio Wert, para quien abrir una investigación es lo correcto. Añadió que los asentamientos están fuera de la legalidad y que “ si se da la casualidad de que en esos campamentos ilegales sólo viven gitanos, pues habrá que echar a esos gitanos”.
